Cuando tienes la suerte de criarte en una zona como la sierra riojana, las costumbres, la sabiduría popular y el buen hacer se llevan en la sangre, los aprendes de pequeño y te acompañan a lo largo de toda tu vida. Es lo que le pasa a Santi de Carnicería Violines.
Descendiente de una familia de ganaderos, es la segunda generación de carniceros. Primero en Torrecilla en Cameros y luego en el Mercado del Corregidor atiende desde su carnicería ofreciendo la mejor selección de carnes de animales criados en la sierra y embutidos propios.
Los chorizos tienen un toque muy especial, tan especial como puede ser la receta de la abuela. Y es que, los chorizos que podéis encontrar en esta carnicería del Mercado del Corregidor, están hechos como los de antes y eso se nota.

Estamos en la mejor época del año para hacer chorizo de la manera más tradicional. El proceso natural de secado estos embutidos nos obliga a utilizar el frio de la sierra, y ahí estarán reposando hasta que la curación en los secaderos naturales alcance su nivel óptimo como se hacia en las matanzas tradicionales.
La fabricación los chorizos se realiza con maquinaria adaptada a la normativa sanitaria, pero la curación es tal y como la hacían las abuelas hace sesenta años. Abriendo o cerrando ventanas y utilizando las corrientes de aire de la sierra para conseguir que se cure el embutido con unas características muy particulares.

El producto es 100% natural, utilizan canales de cerdo entero porque venden las partes nobles del animal en el mostrador de la carnicería y con las paletas, jamones y la parte grasa, hacen el chorizo.
Un chorizo característico y muy tradicional que nos recuerda a los sabores con verdad, los que vienen de la historia y de las tradiciones de la sierra riojana, directos del secadero a vuestras despensas para que disfrutéis del aunténtico chorizo riojano.